lunes, 20 de abril de 2009

la ciudad te dice...

aparece la luz, y se crea un color nuevo. La ciudad tiene voz ahora. Los balcones y sus ventanas se abren, las calles ya no son los puntos de fuga de las avenidas. Me planteo de nuevo pintar, necesito un cuaderno grande, porque la vista es grande. El río se hace grande. Grandes manchas de color. Mirar al cielo grande. Y tener de sobra. Tener tarde de sobra para lecturas que no acaben; pared de sobra para colgar lienzos grandes; amigos de sobra; hambre de sobra; música de sobra, que no acabe, ni el atardecer ni la noche ni el amanecer; calles de sobra, que no acaben, para cuando me asalta el impulso de correr, para cuando escucho la gran llamada, esa voz que grita alto, que engancha ...